Método japonés ayuda a enfrentar los desafíos de la industria minera
Aumento de costos, variaciones de precio, cambios normativos, alta rotación y cambios en el liderazgo y una cultura arraigada son algunos de los grandes retos a los cuales las faenas mineras se enfrentan, y que gracias a la ayuda de consultores Lean pueden implementar este modelo en sus operaciones.
Optimizar los procesos de producción y gestión de las empresas mediante la utilización de menos recursos, este es uno de los principios en los que se basa el modelo Lean, filosofía de gestión y operación que nació en Japón post Segunda Guerra Mundial de la mano de ingenieros de Toyota y otras empresas manufactureras y que se hace conocida en occidente a fines de los 80’s como Lean Management. En esa época el modelo fue todo un éxito, y al igual que hoy son varios los rubros que buscan implementarla, siendo uno de estos, la minería.
La industria minera tiene un gran potencial para cumplir con sus objetivos aplicando el modelo Lean, siendo los desafíos más grandes a los cuales se enfrentan los siguientes:
– Aumento de costos: Cada vez los minerales están más lejos y en menor cantidad, lo que impacta en los costos de exploración, extracción y producción. Una aplicación objetiva y centrada de Lean ayuda a mantener los costos bajo control con la sucesiva identificación e implementación de oportunidades de mejora.
– Fluctuaciones de demanda y variaciones de precio puntuales: La implantación de Lean proporciona una ventaja competitiva, ya que impulsa la flexibilidad de los procesos y fomenta una cultura de mejora continua dentro de la organización, lo que permite identificar y eliminar los desperdicios y ofrece opciones para que la empresa responda adecuadamente a las variaciones del mercado.
– Cambios ambientales: La explotación minera está sujeta a normativas cambiantes, obligando a generar cambios en el funcionamiento de la organización. La implantación de Lean a través de la estandarización de procesos ayuda a las empresas a generar la disciplina necesaria para afrontar estos cambios en los procedimientos con flexibilidad y armonía de forma clara, objetiva y eficaz.
– Compromiso y moral: Hoy en día, cuando muchas empresas mineras han alcanzado el tamaño de grandes empresas en las que la visibilidad de los altos directivos rara vez llega a los niveles operativos, se necesita un nuevo modelo de gestión. La cultura Lean suele incluir un enfoque Top-Down en términos de visión, fijación de objetivos e impulso, mientras que se beneficia de un enfoque Bottom-Up en términos de estrategia de implementación.
– Alta rotación y frecuentes cambios de liderazgo: El impacto de la rotación de personal es un reto al que se enfrenta toda la industria minera. Lean, con su cultura de mejora continua y estandarización de procesos, nos permite desarrollar sistemas de gestión y operación que no se ven afectados por los cambios de personal y permiten una rápida formación del personal y mejora de los procesos.
– Cultura arraigada: La resistencia al cambio debe tenerse en cuenta a la hora de implantar una transformación Lean. Siendo importante demostrar en una fase temprana que se busca, simplificar el trabajo y hacerlo más fácil para el personal, y no al revés.
Más noticias y novedades en nuestras RRSS:
Instagram: @revistatransporteterrestre
Youtube: @RTTrevistatransporteterrestre
Facebook: @RevistaRtt
Linkedin: Rtt-revista-transporte-terrestre